En la primavera, los jardineros comienzan a cuidar árboles y arbustos. Los árboles frutales son más propensos a congelarse a bajas temperaturas. Las peras son una de ellas. Las señales de que una pera está congelada indican la necesidad de tomar medidas para salvar el cultivo. Podar un poco y regar bastante suele ser suficiente.
Que hacer con un peral congelado
Cómo identificar una pera congelada
Los árboles frutales se congelan independientemente de la edad de la planta.
El hecho de que la pera esté congelada está indicada por brotes oscuros y corteza. El núcleo del tronco también cambia de color. Para verificar, corta una rama al final y mira el color. En una pera saludable, debe ser de color beige. Si el tono se vuelve marrón o marrón oscuro, la planta está congelada.
Otra señal es la aparición de congelaciones. Estas son grietas longitudinales en la corteza, que aparecen como resultado de las diferencias de temperatura durante el día y la noche. Durante el día, bajo la influencia del sol, la corteza se calienta y se expande, y por la noche se contrae, por lo que aparecen las rupturas de la capa superior. Esta deformación se limpia, desinfecta con sulfato de cobre y luego se cubre con barniz de jardín.
Si las peras están congeladas, esto no significa que el árbol esté muerto. A menudo, los extremos de las ramas se congelan ligeramente debido a la deshidratación durante el otoño seco. Otra razón es que no tuvieron tiempo de madurar. Para evitar esto, es necesario un riego especialmente cuidadoso en el calor.
El blanqueo en otoño también sirve como capa protectora contra la congelación.
Determinación del grado de congelación.
Los métodos para determinar la extensión del daño son un control efectivo de que la pera no está completamente congelada.
Hay 2 formas de verificar:
- Un corte de una rama de 3-4 años. Lo ponen en agua durante 4 días y observan el color de la madera. Si la pera tiene un tinte verde claro, los efectos negativos de las heladas no se reflejaron en ella. Además, los brotes crecen en la rama y los brotes se hinchan. En un árbol muy congelado, la madera se vuelve negra.
- Un corte del tronco en la corteza. El cambium intacto permanece verde, mientras que el fallecido se vuelve marrón, casi negro. Tal planta es poco probable que se salve. La herida de un árbol vivo se cubre de verde brillante inmediatamente después del corte, y luego con barniz de jardín o pintura al óleo natural.
En algunos casos, incluso la corteza negra no indica la muerte completa de la pera. Después de descongelar el suelo, verifique las raíces. Para hacer esto, se extraen, se hace una incisión en la corteza y se verifica el cumplimiento de un color específico de madera.
Primeros pasos para salvar el árbol.
Una pera congelada necesita ser cortada
En primer lugar, las peras congeladas deben podarse, independientemente de la variedad. La poda se realiza en primavera, finales de abril y principios de mayo. Las partes dañadas se rastrean bien durante este período. El procedimiento se lleva a cabo con cuidado para evitar grandes heridas. De lo contrario, su crecimiento excesivo a largo plazo conducirá al cáncer negro. Además, los lugares de los cortes se tratan con brea de jardín, y los árboles se riegan abundantemente y a menudo sin agregar fertilizantes minerales.
Una pera joven (2-5 años) realmente se puede salvar, incluso si está congelada hasta la capa de nieve. En este caso, no solo la parte superior y algunas ramas, sino también su parte del suelo se cortan por completo, dejando solo madera saludable.
En ambas situaciones, los troncos de los árboles congelados están cubiertos de humus. Esto es necesario para mantener la humedad y la reproducción de las lombrices de tierra. El suelo cercano a menudo se afloja y se quema.
Cuidado especial de pera
Si la planta se congela en invierno, es necesario cuidarla no solo en primavera, sino hasta que esté completamente restaurada. Durante la floración y la configuración de la fruta, la mayoría de las frutas se eliminan, dejando solo una cuarta parte. El riego abundante de la planta es obligatorio. En octubre-noviembre, se lleva a cabo un riego de carga de agua, en el que el suelo se empapa 40 cm. También se aplican fertilizantes orgánicos debajo de la copa de los árboles.
En caso de congelación leve, no es difícil restaurar los árboles. Si la escarcha ha afectado la raíz, es mejor arrancar la planta y plantar una nueva plántula.
La reanimación de las plántulas después de las heladas es una de las opciones.
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Resumiendo
Las heladas severas pueden dañar seriamente las peras, como resultado, el árbol no traerá una gran cosecha. Podar adecuadamente y regar abundantemente son primordiales.